La especie Arsenura armida (Cramer, 1779) es una satúrnido perteneciente a la subfamilia Arsenurinae. [1]
Vive en hábitats tropicales, en vegetación de tipo selva y cuya distribución se extiende desde la SMO, Golfo y suroeste y sur de México hasta Brasil. [2]
Las larvas de los primeros estadios son aposemáticas debido a sus cuerpos brillantes de anillos amarillos y negros y cabezas rojas. [1]
Durante el día las larvas de los últimos dos estadios tienden a estar agrupadas en el troco o las ramas del árbol; mientras que, en la noche en busca de hojas, se mueven a la copa del árbol del jonote o “xonojouitl” (Heliocarpus sp. ) su principal plata de alimentación, aunque el lele (Pseudobombax ellipticum (Kunth) Dugan.), la chirimoya o anona de mono (Rollinia membranaceae Triana y Planchon), el guácimo ( Guazuma ulmifolia Lam.,1789) y el apompo (Pachira aquatica Aubl.), también son otras plantas de alimentación. [3]
Algunos nombres comunes de esta especie son: cuetla, cuecla, cuetlame, gusano del jonote y zats.
Esta especie es de importancia gastronómica, ya que la consumimos en su fase de larva, la cual es fácilmente recolectada durante los meses de julio a agosto. [3]
Las larvas que son seleccionadas para su consumo deben presentar ciertas características como: medir entre 10 y 15 cm, tener un color oscuro, ser “gordas” y carecer de “cuernitos”. [3]
Antes de cocinarlas deben ser limpiadas, lavadas, hervidas y escurridas. De esta manera, se pueden preparar fritas, hervidas, en caldo, tostadas o asadas, al estilo de “tezmole” y “mole”; pero, comúnmente son consumidas como un tipo de botana frita, cuyos sabores son familiares a la carde cerdo (chicharrón), barbacoa de borrego o incluso a pepitas. [3]
Su comercialización como alimento se ha mantenido en Veracruz y Chiapas (en donde son conocidos como zats). [3]
Su aprovechamiento no solo se limita como alimento, también se ha observado que las excretas de esta larva son comercializadas como abono para las plantas. [3]